Tuvo muy buena aceptación y la participación sorprendió incluso a los componentes del mencionado grupo que presenciaban boquiabiertos como los espectadores preguntaban y apuntaban cada mínimo de talle que pudiera resolver el misterio.
El lleno fue absoluto incluso cuando un obra de teatro y una corrida de toros, ambas de primera clase,se desarrollaban a la misma hora.